¿Y si tu hijo no necesita seguridad, sino claridad?

Paula siempre pensó que su hijo Tomás, de 17 años, sería ingeniero. Desde pequeño, todos decían que era “muy bueno en matemáticas” y “tenía futuro”. Pero un día, a meses de terminar la secundaria, Tomás le dijo: “Mamá, no sé…